Semillas de marihuana autoflorecientes femeninas

Características y peculiaridades de las semillas de marihuana autoflorecientes femeninas.

Cuando descubriste que en España es posible comprar semillas (para fines de colección), te has interesado más por las semillas de marihuana. Has de saber que pueden ser de diferentes tipos: semillas de cannabis femeninas estándar, autoflorecientes y de crecimiento acelerado. A diferencia de la marihuana CBD, las semillas de cáñamo clásicas dan nacimiento a una planta de cannabis que producirá flores ricas en THC.

Como puedes imaginar, las semillas autoflorecientes tienen algunas diferencias en comparación con las semillas regulares, pero también en comparación con las feminizadas.

Entonces, ¿qué son las semillas de cannabis autoflorecientes femeninas? ¿Qué las hace diferentes de las semillas normales?

Ten en cuenta que en España no está permitido germinar semillas de marihuana: lo que estás leyendo y lo que leerás aquí se refiere exclusivamente al potencial de las semillas y los cultivos legales (como los de los productores que cultivan plántulas y producen semillas en el extranjero).

Semillas de marihuana autoflorecientes: ¿qué son?

Las semillas de marihuana autoflorecientes femeninas son semillas capaces de generar plántulas femeninas que florecen automáticamente independientemente de la cantidad de luz recibida. Además, estas plantas tienen un ciclo de crecimiento más corto que las plantas regulares y que aquellas exclusivamente feminizadas.

De hecho, estos dos tipos son estacionales, por lo tanto, su crecimiento y floración dependen principalmente de las cantidades de luz y oscuridad recibidas.

La floración espontánea de las autoflorecientes es un rasgo heredado de las especies silvestres de ruderalis: para generar autoflorecientes pero al mismo tiempo garantizar una buena producción de THC y otros cannabinoides, los productores de semillas de marihuana cruzan las especies de ruderalis con variedades índica y sativa feminizadas.

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El ciclo de vida de las semillas de marihuana autoflorecientes

Como habrás leído, los ciclos regulares de floración de índica y sativa dependen del fotoperiodo, lo que significa que la planta regula las etapas de crecimiento y floración en función de las horas de luz y oscuridad para determinar cuándo es el momento de florecer.

Las horas de mayor oscuridad causan la formación de una hormona llamada fitocromo que hace que comiencen las etapas de floración.

El ciclo de vida del cannabis autofloreciente es diferente del cannabis clásico. De hecho, florece automáticamente después de una cierta edad y transcurrido un periodo de tiempo (y no debido a cambios en el ciclo de luz).

Algunas semanas después de la germinación, la planta autofloreciente comienza a producir flores (en el caso de marihuana sin THC: flores CBD que son útiles para la producción de aceite CBD, por ejemplo)

mientras continúa creciendo.

Las variedades autoflorecientes tienen un ciclo vegetativo limitado, lo que significa que florecen automáticamente dentro de unos 17-28 días de crecimiento, dependiendo de las características de la cepa.

Precisamente por esta razón, tienden a ser más bajas que las plantas regulares y feminizadas. La altura de las autoflorecientes varía de 0.3 a 0.9 m de acuerdo con las diferentes variedades.

La cosecha, por supuesto, también es temprana. La marihuana autofloreciente tiende a estar lista para la cosecha en un período de entre 60 y 80 días.

También hay algunas condiciones de crecimiento simples que permiten que las semillas de cannabis autoflorecientes se desarrollen de manera óptima. Son las siguientes:

• Algunas plantas parecen crecer mejor bajo 20 horas de luz y 4 horas de oscuridad y otras prefieren una relación de 18/6.
• En los primeros 12-14 días, la planta no necesita nutrientes, solo agua.
• Después de dos semanas, es posible comenzar a alimentar a la planta con una pequeña cantidad de fertilizantes muy livianos.
• Después de una o dos semanas de crecimiento de la planta, se puede pasar a los fertilizantes para la floración.
• Una semana antes de la cosecha, es aconsejable dejar de dar fertilizantes a la planta.

Pero, ¿por qué las semillas autoflorecientes son tan populares y cuáles son sus ventajas y desventajas?

Ventajas y desventajas de las semillas de marihuana autoflorecientes.

Quienes cultivan semillas de cannabis autoflorecientes (recordamos que esta práctica no es legal en España) pueden disfrutar de varias ventajas. Son las siguientes:

• Rápido crecimiento
• 99.9% de producción de plántulas femeninas y, en consecuencia, de flores ricas en THC y CBD.
• Tamaño pequeño para poder cultivar varias plantas en espacios pequeños.
• Posibilidad de cultivar semillas autoflorecientes en exterior en diferentes épocas del año.
• Resistencia a numerosas enfermedades y mohos.

Sin embargo, existen algunas desventajas que hacen que las semillas autoflorecientes sean desfavorables para grandes producciones:

• Dado que las semillas de cannabis autoflorecientes tienen una genética ruderalis, el contenido de THC tiende a ser algo más bajo que las variedades regulares o feminizadas.
• Debido al pequeño tamaño de la planta, el rendimiento tiende a ser medio bajo, pero puede compensarse con una rápida rotación de cultivos.

Se deduce que aquellos que plantan estas semillas generalmente lo hacen con fines personales y no comerciales, a menos que tengan la oportunidad de rotar los cultivos con mucha frecuencia o de cultivar numerosas plántulas.

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En conclusión

Como puedes leer, las semillas de marihuana autoflorecientes nacen del cruce de la variedad ruderalis con una índica o sativa feminizada.

La floración automática, que no depende de los ciclos de luz y oscuridad o las estaciones, y un crecimiento muy rápido (la cosecha generalmente tiene lugar después de 10 semanas) provienen de las características de la ruderalis. La producción de 99.9% de plantas y flores femeninas con un alto contenido de THC deriva de la genética de las plantas feminizadas.

Estas semillas pueden generar plantas que son muy resistentes al moho y a las enfermedades, además de ser perfectas tanto para el cultivo en exterior como en interior.