Los beneficios de la marihuanas: una visión integral

COMPONENTES Y PROPIEDADES MEDICINALES DE LA MARIHUANA: TODO LO QUE NECESITAS SABER

La marihuana, conocida científicamente como Cannabis sativa, ha sido objeto de debate y estudio durante décadas, especialmente en lugares como Estados Unidos y la Ciudad de México, donde las leyes en torno a su uso han evolucionado significativamente. Este artículo explorará en profundidad los beneficios medicinales y terapéuticos de la marihuana, basándose en estudios recientes y evidencia científica que respaldan su uso en diversas afecciones médicas.

La marihuana CBD es una variedad de cannabidiol modificado genéticamente que respeta los parámetros impuestos por la ley sobre narcóticos. En lo que se refiere al cannabis, de hecho, se considera a todos los efectos como una droga ligera solo si la concentración del metabolito psicótico, THC (tetrahidrocannabinol), no supera el 0,2%.

Con el reglamento delegado nº2017/1155 de la Comisión Europea del 15 de febrero de 2017, se establece que la variedad ligera de marihuana, o el contenido de THC que se encuentra dentro de los parámetros tolerados (hasta un máximo del 0.2 %), es totalmente legal en España.

Este artículo explorará en profundidad los beneficios medicinales y terapéuticos de la marihuana, basándose en estudios recientes y evidencia científica que respaldan su uso en diversas afecciones médicas.

Introducción a la marihuana y sus componentes

El uso de marihuana ha generado un intenso debate legal y social, reflejado en las variadas leyes que regulan su consumo y distribución. De hecho, la marihuana es una planta que contiene más de 100 compuestos químicos llamados cannabinoides, siendo el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD) los más conocidos y estudiados. Estos cannabinoides interactúan con el sistema endocannabinoide del cuerpo humano, el cual juega un papel crucial en muchas funciones corporales y del sistema nervioso.

El THC es conocido por sus efectos psicoactivos, los cuales pueden inducir sensaciones de euforia y relajación, mientras que el CBD no produce estos efectos psicoactivos y es valorado por sus posibles beneficios médicos. Estos cannabinoides actúan sobre los receptores específicos del sistema nervioso y el cerebro, influyendo en diversas funciones corporales y psicológicas durante y después del consumo de marihuana.

Además de las sustancias THC y CBD, la planta de marihuana contiene otras sustancias y compuestos, como terpenos y flavonoides, que contribuyen a sus efectos y propiedades medicinales, y que están siendo objeto de estudio por numerosas facultades de medicina alrededor del mundo.

Estos párrafos introductorios establecen una base para entender mejor los complejos componentes de la marihuana y su potencial impacto en el cuerpo y la mente, preparando el escenario para una discusión más profunda sobre sus aplicaciones médicas y los debates legales que la rodean.

Uso medicinal de la marihuana: propiedades, beneficios y regulación

El uso de la marihuana en ámbito medico ha ganado aceptación en varios países, gracias a sus propiedades para aliviar síntomas de múltiples enfermedades. Entre estas, destacan la esclerosis múltiple, el VIH, el cáncer, y enfermedades neurológicas como la enfermedad de Alzheimer y el síndrome de Tourette. Los estudios han demostrado que el consumo de cannabis puede ayudar a reducir el dolor, las náuseas, y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

De echo, en los Estados Unidos y otros países, el uso medicinal de la marihuana ha sido legalizado para tratar una variedad de afecciones, gracias a sus efectos sobre el dolor, las náuseas, y otros síntomas asociados con enfermedades como el cáncer, la esclerosis múltiple, el VIH y la enfermedad de Alzheimer. También las semillas de cannabis tienen muchos beneficios para los seres humanos.

Desde un punto de vista médico, los cannabinoides han demostrado tener propiedades antiinflamatorias, anticonvulsivas y analgésicas. Por ejemplo, en el tratamiento del dolor crónico, el THC actúa no solo reduciendo el dolor sino también mitigando la ansiedad y la depresión asociadas a diversas afecciones crónicas. Por otro lado, el CBD ha ganado atención por su capacidad de actuar sin los efectos psicoactivos del THC, ofreciendo beneficios para el control de convulsiones en síndromes epilépticos graves como Dravet y Lennox-Gastaut, y mostrando potencial en estudios preliminares como agente antitumoral y neuroprotector.

Veamos a continuación algunos de los principales beneficios del consumo de marihuana.

Control del dolor y efecto antiinflamatorio

Una de las aplicaciones más reconocidas del uso de marihuana es el tratamiento del dolor crónico. Los cannabinoides, especialmente el THC, muestran efectos analgésicos significativos, que pueden ser beneficiosos para pacientes que sufren dolores relacionados con enfermedades crónicas como la artritis o el dolor neuropático.

El efecto antioxidante y antiinflamatorio del CBD, de dónde también se extrae el hachis CBD, está relacionado con su acción sobre dos endocannabinoides, CB1 y CB2. Los endocannabinoides son receptores que nuestro cuerpo produce de manera autónoma, muy similares a los fitocannabinoides, o a los metabolitos producidos por las plantas de cannabis.

Se descubrió que el endocannabinoide CB1 juega un papel fundamental en el desarrollo del sistema nervioso y desempeña una función neuroprotectora, determinando principalmente los efectos de euforia, antioxidante, hipotensor, analgésico y antiespasmódico del cannabis legal. El CB2, por otro lado, es responsable de la acción antiinflamatoria e inmunomoduladora de los cannabinoides. También estimula positivamente tanto los endocannabinoides, de los cuales su función antioxidante y antiinflamatoria es ideal para aliviar el dolor causado por desgarros y traumas, así como enfermedades crónicas como la artritis reumatoide, el asma, la sinusitis.

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Efecto analgésico de la marihuana legal.

Como se ha mencionado, el CBD interactúa de manera beneficiosa con los receptores endocannabinoides CB1 y CB2, lo que resulta en un efecto analgésico notable. Este mecanismo de acción es uno de los principales usos terapéuticos del CBD y de algunos de sus derivados, como el aceite de CBD, reconocidos por su eficacia como analgésicos. Específicamente, el CBD impide que el cuerpo absorba la anandamida, un compuesto natural asociado con la regulación del dolor, lo que contribuye a una gestión más efectiva del dolor sin los efectos secundarios comunes de los analgésicos tradicionales.

En presencia de dolores crónicos, como migrañas, esclerosis múltiple o dolores reumáticos, el CBD es un excelente sustituto de los analgésicos clásicos, cuyos efectos secundarios generalmente incluyen:

• náusea

• vómito

• diarrea o estreñimiento

• hemorragia gastrointestinal.

Además, el uso de productos basados en CBD, como aceites y cápsulas, ofrece una alternativa a quienes buscan tratamientos menos invasivos y con menores riesgos de adicción en comparación con opiáceos y otros medicamentos potentes. Esta evolución en la percepción y legislación sobre el cannabis refleja un reconocimiento más amplio de sus potenciales terapéuticos, priorizando la salud y bienestar de los pacientes sobre los estigmas históricos asociados con esta planta.

Efectos Anticonvulsivos y Antitumorales

El CBD ha mostrado resultados prometedores en el tratamiento de formas graves de epilepsia en la niñez, como el síndrome de Lennox-Gastaut y el síndrome de Dravet, lo que llevó a la FDA a aprobar el primer medicamento basado en CBD para estas condiciones en 2018. Además, investigaciones recientes sugieren que el CBD podría tener efectos antitumorales, mostrando la capacidad de bloquear la metástasis en ciertos tipos de cáncer, como el de mama.

El Departamento de Neurología y el Departamento de Farmacología y Toxicología de los EE. UU. han realizado numerosos estudios sobre los efectos del CBD en los dos tipos de epilepsia grave que se dan en la infancia o la niñez temprana: el síndrome de Lennox-Gastaut y el síndrome de Dravet.

Las investigaciones han arrojado resultados increíbles: de los 8 pacientes que tomaron CDB, 4 registraron la interrupción de las convulsiones y 3, en cambio, una reducción de la violencia y su frecuencia.

Este es un logro notable que llevó a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) a votar por unanimidad, el 25 de junio de 2018, para la aprobación del primer fármaco para el tratamiento de la epilepsia basado en el CBD, Epidiolex.

Además, en 2007, el Instituto de Investigación del Centro Médico del Pacífico de California publicó un estudio pionero que demostraba la capacidad del CBD para inhibir la metástasis en el cáncer de mama. Este descubrimiento sugiere que el CBD puede prevenir la propagación del tumor a otras partes del cuerpo, un avance crucial para el tratamiento del cáncer que podría cambiar el curso de la medicina moderna. Posteriormente, en 2008, el Journal of National Cancer Institute publicó otro estudio que no solo reforzaba estos hallazgos sino que también los extendía a otros tipos de cáncer. Estos estudios indican que el CBD podría desempeñar un rol vital en la prevención de la diseminación metastásica de tumores, ofreciendo así una nueva esperanza para el tratamiento y la gestión del cáncer.

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Riesgos y regulación legal

A pesar de los numerosos beneficios asociados con el uso medicinal de la marihuana, su consumo no está exento de riesgos y puede conllevar varios efectos secundarios, incluidos la euforia, cambios en el apetito y, en algunos casos, un riesgo potencial de adicción. La marihuana, al interactuar con el sistema nervioso central, puede influir en la psicología y el comportamiento del usuario, llevando a veces a dependencia en individuos predispuestos. Además, el uso a largo plazo y en altas dosis puede estar asociado con efectos adversos como deterioro de la memoria, dificultades en la concentración y potenciales efectos psicológicos.

La regulación del uso de marihuana varía significativamente entre diferentes estados y países. Por ejemplo, en algunas áreas de Estados Unidos, así como en la Ciudad de México, se ha legalizado el uso de cannabis tanto para fines medicinales como recreativos. Estas leyes han cambiado notablemente la percepción pública sobre la marihuana, pasando de verla solo como una droga ilegal a reconocer sus propiedades terapéuticas y potencial económico. Esto ha llevado a un aumento en la investigación científica y en el interés por parte de la industria farmacéutica para desarrollar nuevos medicamentos basados en componentes de cannabis.

Sin embargo, la legalización también ha planteado desafíos en cuanto a la regulación de su producción y venta, la necesidad de establecer límites de consumo seguros y la implementación de campañas de educación para informar al público sobre los efectos y riesgos del consumo de cannabis. Estos aspectos son cruciales para mitigar los riesgos asociados con su uso y para garantizar que los beneficios del cannabis se maximicen mientras se minimizan sus potenciales daños. La colaboración entre investigadores, médicos, y legisladores es esencial para crear un marco regulatorio que apoye tanto el control médico como el acceso seguro para los pacientes que pueden beneficiarse de su uso terapéutico.

Conclusiones: el potencial terapéutico de la marihuana

La marihuana posee una serie de beneficios potenciales para el tratamiento de diversas afecciones médicas. Sin embargo, es crucial que su uso sea supervisado por profesionales de la salud para minimizar riesgos y maximizar beneficios terapéuticos. Con la evolución de la investigación y las regulaciones adecuadas, el futuro del cannabis como tratamiento médico es prometedor, especialmente en mejorar la calidad de vida de los pacientes a nivel global.

Uno de los ámbitos más prometedores en la investigación del cannabis es el estudio de los efectos antitumorales del CBD. Investigaciones han mostrado que el CBD puede inhibir la metástasis de ciertos tipos de cáncer, como el de mama, lo que sugiere su posible rol en la prevención de la diseminación de tumores. Estos descubrimientos subrayan la importancia de seguir investigando y respaldan la legalización y regulación del cannabis para uso médico, lo que podría permitir integrar el CBD de manera efectiva en tratamientos oncológicos como una opción segura y menos invasiva en comparación con métodos tradicionales.

Este panorama alentador incita a considerar el uso de productos de CBD, bajo adecuada supervisión médica, como una alternativa terapéutica viable. Para explorar productos de calidad, puede visitar nuestra tienda online justbob.es, que ofrece una variedad de productos CBD.

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